La cirugía LASIK es un procedimiento de corrección visual que utiliza tecnología láser para modificar la forma de la córnea y mejorar la manera en que la luz entra al ojo. Este tratamiento es una alternativa moderna a los lentes de contacto o anteojos, ya que puede corregir problemas refractivos como miopía, hipermetropía y astigmatismo. En Monterrey, cada vez más pacientes eligen LASIK por sus resultados rápidos, seguros y duraderos.
Durante la cirugía, se emplean dos tipos de láser: el láser de femtosegundo, que crea un delicado colgajo en la córnea, y el láser excimer, que remueve una mínima cantidad de tejido para remodelar la superficie corneal. Este proceso permite que la luz se enfoque correctamente en la retina, logrando una visión clara sin la necesidad de lentes. El procedimiento suele durar menos de 15 minutos por ojo y se realiza de manera ambulatoria.
No todas las personas son candidatas para LASIK. Generalmente, el procedimiento está indicado para pacientes:
Además de los criterios básicos, se consideran otros factores importantes: la salud general del paciente, la ausencia de enfermedades autoinmunes, y no tener antecedentes de cirugías oculares complejas. También se evalúa el estilo de vida del paciente, ya que personas con trabajos que requieren visión precisa sin gafas —como deportistas, militares o profesionales de la construcción— suelen beneficiarse mucho del procedimiento.
En la consulta inicial, el oftalmólogo realizará un estudio detallado de tus ojos que incluye medición de la graduación, mapeo corneal, grosor de la córnea y evaluación de la salud ocular en general. También se hablará de tu historial médico y tus expectativas visuales. Al finalizar la evaluación, recibirás una recomendación clara sobre si eres candidato para LASIK o si algún otro procedimiento sería más adecuado para ti.
Antes del procedimiento, se recomienda dejar de usar lentes de contacto entre una y cuatro semanas, según el tipo, ya que estos pueden alterar temporalmente la forma de la córnea. Asimismo, se aconseja acudir con los ojos limpios y sin maquillaje el día de la cirugía. Durante la consulta preoperatoria, el equipo médico te dará todas las indicaciones necesarias para que llegues preparado y seguro.
La cirugía LASIK es rápida e indolora. Tras aplicar gotas anestésicas, el cirujano crea un colgajo delgado en la córnea con un láser de femtosegundo y posteriormente utiliza un láser excimer para remodelar el tejido corneal. El colgajo se recoloca en su sitio y comienza a cicatrizar de manera natural sin necesidad de puntos. Todo el procedimiento toma alrededor de 10 a 15 minutos por ojo.
Entre los principales beneficios destacan:
La mayoría de los pacientes experimenta una mejora visual significativa en las primeras 24 horas. Se recomienda descansar el mismo día del procedimiento y evitar frotarse los ojos. Durante la primera semana, es importante usar gotas lubricantes y evitar maquillaje ocular o nadar en albercas. En general, podrás retomar tus actividades normales en pocos días, aunque la visión continuará estabilizándose durante varias semanas.
Después de la cirugía, deberás asistir a revisiones de seguimiento con tu oftalmólogo. Estas consultas son esenciales para verificar la correcta cicatrización del colgajo y la estabilidad de tu visión. Generalmente, se realizan visitas al día siguiente, a la semana, al mes y luego a los tres meses. Cumplir con este plan de seguimiento garantiza los mejores resultados visuales a largo plazo.
No, se utilizan gotas anestésicas para garantizar comodidad.
Sí, aunque el envejecimiento natural del ojo puede requerir ajustes en el futuro.
La mayoría regresa en 1 a 2 días.
El riesgo es extremadamente bajo, especialmente cuando la realiza un especialista certificado.
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